
Antesdeayer, tras una agotadora jornada de 10 horas con malas condiciones, Alex Txikon, Ali Sadpara, Tamara Lunger y Simone Moro alcanzaban el campo 2, situado a 6.100m de altitud. Encontraron serios problemas en el muro Kinshofer por la caída de nieve, y una sorpresa desagradable al llegar: el fuerte viento había destapado el depósito, llevándose dos aislantes. Decidieron extender la tienda que portan para instalar el campo 3 en el suelo, pero eso no evitó que hayan pasado bastante más frío del que deberían.
Por la noche se levantó un viento huracanado en la montaña que les impidió asomar la nariz fuera de la tienda, así que la jornada de ayer la tuvieron que pasar dentro de ella ejercitando la santa paciencia en el noble empeño de que no saliera volando por los aires con ellos dentro. Este viento también se dejó sentir en el campo base, en donde estuvo a punto de llevarse alguna tienda por delante.

Este viento continuó hasta las 2:00am, hora local. En contraste, el día de hoy ha amanecido “espectacular y apacible”, en palabras de Igone Mariezkurrena desde el campo base. Así que, pasadas las 9:30am, los 4 alpinistas partían hacia el lugar del campo 3, a 6.700m, en el que recordemos que dejaron un pequeño depósito, y hasta el que Alex Txikon y Ali Sadpara ya tiraron cuerda, pero en el que no hay tiendas; las cargan ellos en esta subida. Calculan que necesitarán 4 horas.
Si el tiempo les da una oportunidad, la subida que están realizando, a diferencia de la del año pasado, es extremadamente adecuada: poco a poco, sin esfuerzos extremos, y encima con un día de descanso en el campo 2. Es de suponer que, si todo va bien, mañana superarían los 7.000m, instalando el campo 4, y el viernes sería día del intento de la 1ª cumbre de la historia en el Nanga Parbat.
Mucha suerte.