
Hace ya 10 años que Ondra colocó los bolts a la línea que, en ese momento, consideró imposible de solventar. Los tiempos cambian, la escalada evoluciona y, finalmente, ha escalado la vía otorgándole un grado de 9b, matizando que en su frontera superior, aunque afirma que “no puedo darle un 9b+ porque solo me ha costado 5 días de limpieza y pruebas”. Lo ha conseguido en el último momento, justo horas antes de tener que regresar a su hogar en Chequia.
La vía comienza con una zona de 8b+ hasta un reposo. A partir de él, 10 movimientos clave que, en el suelo, ya serían un 8c de bloque por si mismos.
Sobre el nombre, Bomba, afirma que viene de la expresión italiana “perche questo tiro e una bomba” (esta ruta es tan buena), pero que también quiere ser un homenaje: “tristemente, la gente de Ucrania está lidiando con otro tipo de bombas muy diferentes”.