
La vía, según Iker, es “una auténtica maratón”, y ahí no se acaban las posibilidades de Guggenheim. “Quedan por enlazar las otras dos salidas lógicas, ¡aún más difíciles!”. Esto, probablemente, llevaría al 9b o 9b+.
Son ya décadas las que llevan los hermanos Pou al pie del cañón, entre la deportiva, el big wall en libre, la escalada clásica con grado de deportiva y el alpinismo técnico por las cordilleras del mundo. Siempre al máximo nivel, y sin visos de que pretendan levantar el pie de acelerador.
Solo hay que ver cómo Iker solventa una 1ª escalada a un 9a de deportiva tras las aperturas alpinas en pared que este verano realizó junto a su hermano en Picos de Europa, como Víbora (180m, 8a) y Rayu (600m, 8c).