Los hermanos Eneko e Iker Pou, acompañados en esta ocasión por el escalador argentino Kiko Cerdá, siguen avanzando en su actual proyecto de apertura en la cara sur de Peña Santa de Castilla, Picos de Europa. Una muralla de 600 metros en la que han elegido su parte mas compleja, con un extraplomo en el que están trabajando desde hace bastantes días.


Hasta ahora habían encontrado secciones difíciles, en el séptimo grado, pero ahora que han comenzado la parte mas difícil, la mas extraplomadase han encontrado con el octavo grado. Esto, como es evidente, les está ralentizando en la apertura. Si logran superar esta zona clave, el camino a cumbre quedaría expedito, ya que, según han visto con los prismáticos, las dificultades van decreciendo paulatinamente en el camino a cumbre. Aunque, como suele ocurrir, puede saltar la sorpresa, y hasta que no entren en la zona, no se confirmará.

Para esta “expedición en casa”, y debido a la cantidad de días necesarios, y a que la pared se encuentra a entre 3 y 5 horas de aproximación, según carga, han instalado su campo base en Huerta, preciosa vega a 2.000m de altitud. Ahora ya lo han abandonado, y vivaquean en la pared; han subido hasta la repisa que hay a mitad de ruta, a 300 metros del suelo, con bastante esfuerzo y los habituales sistemas de polea, los mas de 100kg de material que acarrean, entre material de escalada, sacos, esterillas, hornillos, agua, y comida.
