Justo antes del confinamiento, Eneko Pou realizó dos aperturas en solitario en Mallorca, Corto Maltés (6c/170m), y Polvorilla (7b+/170m).
Cuando Eneko iba a enviar la información sobre ambas aperturas, el COVID-19 cambió el planeta, y decidió esperar hasta que las cosas empezaran a volver a la normalidad para comunicarlas.
Ambas vías han quedado listas para ser rapeladas.
Corto Maltés
Le dedica esta primera ruta a uno de sus referentes de juventud, el anti-héroe del cómic Corto Maltés, del gran dibujante italiano Hugo Pratt.
Aunque es más fácil de grado que “Polvorilla”, y por lo tanto, en principio, debería ser más sencilla de ascender la realidad es que, por la mala calidad de la roca en algunos tramos desplomados, con casi toda seguridad será menos repetida.
Cuenta con seis largos repartidos en 170 metros, de los cuales el 2º, 3º, 4º y 5º son bastante desplomados.
La tirada que más parabolts tiene, cuenta con cuatro; el resto del aseguramiento habrá que hacerlo con material flotante (friends y fisureros). “Es una línea con mucha aventura que recomiendo a los más audaces”
Eneko empleo tres días para la apertura desde abajo, combinando el libre con pequeñas secciones en artificial (sin estribos), utilizando el “soloist” para auto-asegurarse, y ganchos, friends, fisureros, vagas y algún bolt para la progresión.
Posteriormente empleó una jornada para la primera escalada en libre, acompañado por Aína Joan Palou.
Polvorilla
Dedicada a una buena amiga, esta ruta es bastante más difícil que la anterior en cuanto al grado, pero al tener una roca mucho más sólida, es probable que pasemos menos miedo en una futura repetición. Esto no quiere decir que no sea expuesta, porque también puede resultar muy psicológica con grandes distancias entre seguros.Eneko necesito seis días para esta apertura, y otros dos más para la primera en libre, primero con Dalila Llanos y después con Juan Benasar. El estilo de apertura fue el mismo que en “Corto Maltés”, desde abajo y combinando el libre con el artificial.
Tiene también seis largos repartidos en 170 m y convendría resaltar que es muy mantenida, ya que ninguno baja del 7º grado.
Durante esta escalada Eneko sí que sufrió una caída en el largo clave (7b+/7c) llevándose un buen susto y unos cuantos metros de vuelo en el aire hasta que se tensó la cuerda (siempre es más difícil de controlar una caída cuando se está escalando solo).
Ha quedado casi totalmente equipada con bolts y solo harían falta dos friends para el primer largo. La roca es excepcional y la vía muy recomendable para gente valiente y fuerte a la que le guste la aventura.
