Vídeo: Michaela Kiersch encadena Era Vella, 9a, Margalef
Una productiva visita de 1 mes de Michaela Kiersch a Margalef culmina con su segundo 9a+, Víctima Perfecta, y con la escalada de Era Vella, 9a. Aquí está el vídeo de la 2ª.
Oriol Baró, Marc Toralles, Roger Cararach, Iker Madoz, Nathan Heald, Coqui Galvez y Luis Crispín...
Un buen año en la Cordillera Blanca. A la excelente actividad de Oriol Baró y Marc Toralles en el Huatsán, de la que informamos hace 1 mes, hay que añadir un buen puñado de repeticiones, entre la que destaca la 1ª repetición de la vía “Tambos, churros y amigos” por parte de Iker Madoz, Marc Toralles y Roger Cararach, en el Jirishanca.
Nos informa sobre esta y otras ascensiones nuestro habitual colaborador Sergio Ramírez Carrascal, Compañía de Guías www.nuestramontana.com, en Huaraz.
Fuentes de Información: Roger Cararach, Marc Toralles, Iker Madoz, Nathan Heald.
El 22 de noche remontan los 3 largos y a primera hora siguiente empiezan a escalar llegando a la R9 a unos 5350 m. en una repisa vivac luego de escalar unos de los largos más bonitos de la vía: 7a y 60 m. verticales continuados.
El 23 escalan hasta su siguiente vivac R16 a 5650 m. superando largos de roca hasta 7º, A2 con tramos de nieve y hielo.
El 24 superan 3 largos de 6c verticales con roca perfecta a más de 5700 m. superando además el primer techo de hielo. Encima de este techo a unos 5800 m. montaron su tercer vivac en una repisa de nieve, por la tarde fijaron 120 m. de cuerda para al día siguiente intentar la cima del Jirishanca. La cuerda es fijada por encima del segundo techo de hielo que superan en escalada artificial a unos 5950 m. de altura aproximadamente.
Tras 6 días de espectacular tiempo, el 25 de madrugada se levantan dentro de una nube y con fuertes vientos, tras comprobar que las previsiones meteorológicas no son buenas para los días siguientes, deciden descender pero muy satisfechos de escalar esta ruta casi totalmente desequipada. Tras unos 20 rápeles llegan a la base y esa misma noche alcanzan el campo base y regresan a Huaraz.
Madoz, Torralles y Cararach están mas que contentos con esta primera repetición de esta vía aperturada en el 2003 por los Franceses Didier Jourdain y Aymeric a quienes agradecen por el estilo y la ñética para afrontar este desafío que desde entonces no es completada por otros alpinistas que a pesar del compromiso y técnica, como esta repetición, no alcanzan la cima principal de esta montaña. Esta vía alcanza los 1000m. de desnivel, 7ª A2, M4, 95°.
El 1 de Julio escalan hasta alcanzar el gran “gendarme” sobre la cresta SE del Allincapac. Este lugar fue denominado en 1960 por una expediciíon Británica como “Pico Carol”. Desde allí el equipo realiza un rapel y escalada en roca difícil hasta alcanzar la meseta de la cima. Demasiado riesgo según comenta Heald en esta zona de la montaña. Al mismo tiempo Duncan McDaniel (USA) y Yasu Beltrami ( Chile ) escalaron una línea paralela en roca a unos 50 m. a la derecha, salieron a la cresta y continuaron a la cima del Ispa Riti (5720 m.) Todos descienden por la misma ruta de la vertiente sur.
Al día siguiente de esta escalada el grupo se divide en 2 dirigiéndose al este del mismo valle, Field y Zimmerman escalan el nevado Papacapac (5460 m.), mientras que McDaniel, Jean Zimmerman Heald (USA ) y Vahitiare Beltrami (Chile) escalan la cara oeste del Chichicapac (5613 m.).
En Octubre del mismo año Heald regresa al Allincapac con Coqui Galvez y Luis Crispín, ambos de Perevado Papacapac (5460 m.), mientras que McDaniel, Jean Zimmerman (Uú, dirigiéndose a la laguna Allincapac y alcanzando la cota 5200 m. donde realizan su campamento de altura en el hombro occidental de la montaña. El 7 de Octubre inician el ascenso a las 2 am y sedirigen a un plateau glaciar bajo la cara oeste. Escalan un largo de WI3 hasta alcanzar una cornisa que les da acceso fácil a la partes superiores, luego de un par de pasos cortos de roca y 2 largos de WI2/3 les conducen por una travesía hasta la cumbre de la montaña cerca de las 8 15 am.
Heald ha encontrando registros de ascensos esta montaña por distintas vertientes desde 1960 hasta el 2008. Siendo una montaña muy poco ascendida.
El grupo se acerca desde el noreste ( Carretera Calca – Lares ). Inician la aproximación desde el poblado de Maucau y tras 5 horas alcanzan su campo alto sin saber donde se encontraban por densas neblinas ( 5 de abril ) Al despejar un poco se dan con la ingrata sorpresa de estar acampados bajo enormes bloques de hielo, mientras intentaban dormir escuchando las continuas avalanchas . Un presentimiento hace que Heald obligue a sus compañeros salir de la carpa y unos minutos más tarde un bloque de hielo cae sobre la carpa y se estrella donde minutos antes Gálvez y Baca estaban durmiendo. El grupo pasa el resto de la noche acurrucados contra la pared de roca mientras llovía. El 6 de abril se mueven a un lugar más seguro ya con mejor visibilidad.
El 7 de abril salen de la carpa a las 2 de la mañana y cruzan el glaciar cubierto de nubes mientras un hermoso amanecer les indica el camino correcto. Después de cruzar el col Can Can - Chainopuerto comienzan a escalar la pirámide final de 180 metros, hielo de 70º por la cara sur. Las nubes provenientes de la selva ya los habían rodeado y reducido su visibilidad a 40 m., deciden ir uno por uno a la cumbre ya que al no ver las cornisas cimeras resultaba una apuesta muy peligrosa. En el descenso se les hace la visibilidad nula, pierden la huella y deciden acampar. El 8 de abril salen finalmente del glaciar y se encuentran con gente de la comunidad que habían subido preocupados por el grupo.
Los escaladores comenzaron en las cercanías de Laguna Singrenacocha, tomándoles 5 días en total. El día cuatro, establecieron un campamento morrena a 5,300 m. y salieron de la carpa a la media noche. Llegaron a la base de la pared principal al amanecer, cruzando varios cientos de metros de nieve a 70 ° hasta la cresta cimera. Desde allí equilibrando el paso a través de una cornisa con “borde de cuchillo” alcanzan la cumbre.
Dos años más tarde (2016) Waldemar y Heald vuelven a Vilcabamba, esta vez acompañados por Florian Peter (Suiza) y Duncan McDaniel (USA). Hacen cumbre en el Salkantay el 29 de julio para comenzar el viaje, y luego fueron hacia la cresta oeste de Pumasillo a principios de agosto. Empiezan el ascenso desde su campo alto (4.900m) a la media noche. Florian tuvo que dar la vuelta debido a una tos que se ponía más preocupante. Caminaron todo el día a través de terreno peligroso y grietas en el glaciar. Un bloque de hielo del tamaño de un refrigerador se deslizó de la montaña y lograron esquivarlo y salvaguardar su cuerda. Antes de alcanzar la cumbre se enfrentaron a nieve profunda y nubes cubriendo el entorno. Al medio día se detuvieron a 50 m. bajo una cornisa cerca de la cumbre donde una gran grieta les impedía el paso. Rodear 100 m. a la derecha en el estado que ya se encontraban les hizo retornar al campo base a las 10 de la noche luego de muchos rapales “salvajes” sobre seracs de 50 m. de alto. Los escaladores han catalogado al ruta en 1000m, V, TD+, WI4.
Unos días después de esta ascensión, Niclevicz, Mac Daniel y Heald se dirigen al nevado Panta en la misma cordillera Vilcanota. Según documentación, esta montaña parece tener solo un ascenso en 1959 por el club Alpino de Suiza. El grupo se dirige al pueblo de Huacacalle de donde realizan el trekking de aproximación a su campo base. Los pobladores locales llaman a esta montaña “Otaña”. A la 1 am, el grupo inicia el ascenso por el glaciar que desemboca desde la cresta sur hasta alcanzar la cara sur. “Elijen bien” su camino entre grietas y seracs con algunas secciones de WI4, alcanzando la cima a las 10 de la mañana, retornando a su campo base a las 5 de la tarde. Dificultades de la ruta: 850m, V, D+, WI4
Heald comenta: “La cordillera de Vilcabamba sigue siendo una de las zonas menos visitadas del Perú en cuanto a ascensiones pero con un gran potencial de rutas nuevas, no sólo en los picos glaciares, sino también en las formaciones rocosas de granito como las garras del puma y las torres de Quelcamachay. Hoy en día hay muchas carreteras que ofrecen un acceso más fácil a estas áreas. Estoy de acuerdo con lo que los suizos dijeron hace casi 60 años: "Los picos de la Cordillera Vilcabamba podrían ser más bajos que los de la Cordillera Blanca, pero igualados en tamaño desde el valle hasta la cumbre y en dificultad".
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