El Ministerio de Turismo ha adjudicado el trabajo de adecuar la cascada del glaciar de Khumbu para las expediciones de escalada al SPCC desde esta primavera.
Una de las más fáciles rutas hacia el Everest es la que va por su lado sur-este. Fue la ruta que utilizaron los primeros alpinistas que lograron hacer cumbre y ha sido y sigue siendo seguida por cientos de montañeros y escaladores. Pero todos aquellos que decidan tomar este camino deberán cruzar por uno de los más temidos obstáculos naturales del Everest: la Cascada de hielo del Khumbu.
Aunque existía propuestas de la NMA (Asociación de Montañeros del Nepal) para hacerse cargo del equipamiento de esta cascada, finalmente la responsabilidad ha recaído en el Comité. La Asociación siempre se ha mostrado muy entusiasta a la hora de organizar el trabajo en la cascada, proponiendo el pago de una tarifa razonable por parte de las expediciones que quieran cruzar la cascada del Khumbu para escalar tanto el Everest como el Lhotse por su lado sur, e invertir los ingresos que se generen en otros proyectos de la Asociación relacionados con el medioambiente. Sin embargo, el Ministerio de Turismo finalmente optó por el SPCC, tras haber analizado el trabajo realizado por este organismo.Guardando la entrada hacia el lado sur del Everest, la Cascada del Khumbu aparece cuando el glaciar desciende hacia la parte central del valle. En dicho proceso, el glaciar se fractura en un enorme "revoltijo" de inmensos bloques de hielo (conocidos como "seracs") y profundas grietas. Dado que el glaciar está siempre en movimiento, tanto los seracs como las grietas pueden desplazarse. El trabajo del Comité consistirá en facilitar el paso a través de esta cascada a las numerosas expediciones que concurrirán esta primavera en el valle del Khumbu.