Los integrantes de la expedición alpinístico-científica Pumori 2000 se encuentran ya en la Pirámide-laboratorio de la CNR, en el nepalí valle del Khumbu, listos para intentar conquistar los 7.161 metros de hielo y roca que conforman el Pumori.
Michele Comi, líder de la expedición Pumori 2000 |
La expedición, formada por los italianos Michele Comi y Daniele Bernasconi -ambos guías de alta montaña y geólogos-, Fabio Salini y Daniele Fiorelli, deberá realizar labores de recogida de muestras, con el fin de llevar a cabo diversos estudios sobre la nieve.
Las muestras, que serán recolectadas a diferentes altitudes serán objeto de estudio en el programa de control de medio ambiente que lleva a cabo el instituto de investigación italiano, el CNR (Consiglio Nationale di Ricerca). En total son 16 las muestras de nieve que los expedicionarios deben recoger, incluida una muestra de la que se encuentra en la cima del Pumori.Dentro del gran proyecto de investigación multidisciplinar (Ev-K2-CNR) que lleva a cabo el CNR en el valle del Khumbu la sección dedicada a la investigación medioambiental ha derivado en un innovador proyecto de control medioambiental, patrocinado por el departamento de Ciencias Ambientales de la Universidad de Venecia.Pirámide-laboratorio del CNR, situado a 5.050 m. en el valle del Khumbu, Nepal. |
Los mecanismos de formación y acumulación de la nieve en altura darán una idea del estado de la atmósfera e incluso de los posibles elementos dañinos que la dañan, como por ejemplo los derivados de la combustión del petróleo. Las partículas de nieve del Pumori, situado justo en la frontera entre Nepal y Tíbet, y a caballo entre dos países de altísima densidad demográfica y creciente industralización como son India y China, serán un buen referente para verificar la "salud" de la atmósfera.
Los expedicionarios, que ascenderán en estilo ligero por la ruta que discurre por la vertiente sureste de la montaña, deberán seguir un estricto protocolo a la hora de recoger las muestras de nieve, para impedir su posible contaminación y pérdida de temperatura. Para ello, los alpinistas, armados de mascarillas y guantes asépticos, depositarán las pruebas en bolsas térmicas hasta su traslado al Campo Base. De ahí, y una vez guardadas en bolsas refrigerantes alimentadas mediante una batería, serán llevadas al centro de investigación, en el valle del Khumbu desde donde partirán, por helicóptero, a Kathmandú. Una vez allí serán de nuevo enviadas para su posterior estudio a Italia.