El equipo liderado por el brasileño Waldemar Niclevicz ha sido el primero en montar el Campo II, junto a la pared del Lhotse; entretanto, en la cara norte, Marco Sifredi trata de escalar por la normal para descender esquiando el terrible corredor Hornbein. En el vecino Cho Oyu, también predominan las ‘tablas’.
Porteos en la zona baja del Cho Oyu |
Waldermar Niclevicz, primer brasileño en ascender el K2 y la gran torre del Trango, se encuentra estos días realizando la ascensión al Everest or la vertiente Sur, perteneciente a Nepal, con el objeto de alcanzar la cumbre sin ayuda de oxígeno suplementario. Los expedicionarios brasileños ya se llevaron un buen susto cuando un alud barrió su Campo I. Por suerte, no había nadie en las tiendas en aquel momento, pero se ha perdido una parte importante de su material. Pese a todo, han seguido avanzando y han sido los primeros en alcanzar y montar el Campo II, que se encuentra junto a la pared del Lhotse, a una cota cercana a los 6.500 metros. Incluso, en su última comunicación comentan que han estado caminando por encima del Campo. Una expedición japonesa intenta ascender el Everest, también por la normal de la cara Sur, aunque se encuentran más abajo que los brasileños.
La vía de descenso que planea seguir Marco Siffredi es, a primera vista, casi imposible |
En la misma montaña, peor por su vertiente tibetana (Norte), el snowboarder extremo Marco Siffredi trata de alcanzar la cumbre para luego descender con su tabla , no desandando el camino, sino a través del corredor Hornbein, por la peligrosa cara este. Siffredi ya hizo el primer descenso integral con tabla desde el Everest, a través del corredor Norton, en primavera de 2001. Entonces, el mayor problema de Marco fu la escasez de nieve en la montaña. Ahora, tras el intenso monzón esperaba antes de partir encontrarse el Everest bien cubierto, y con buenas condiciones para propiciar el descenso a través del expuesto corredor.
Y si en el Everest los descensos con tabla aún resultan una hazaña excepcional, en el Cho Oyu parece que se están convirtiendo en una costumbre: Ahora mismo, hay dos expediciones que planean descender la montaña, de 8.201 metros, con tabla de surf. Uno ex un equipo estadounidense, que trata de filmar el descenso para realizar un documental, y el otro es el equipo que apoya al free-rider Emilio Previtali, que ha llamado a su proyecto de Soul Ride. Previtali se ha especializado en Snowboard extremo, y ya hizo de las suyas, el año pasado, en el Pico Lenin, así como varios descensos extremos en los Alpes.A pesar de ser los picos más demandados del Himalaya de Nepal-Tíbet, este año no abundan las expediciones en sus laderas. Es una muestra más del descenso en la llegada de extranjeros a esta zona, aunque sea de las grandes actividades alpinísticas.